Simone Vallerotonda

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Zamboni “L’ultimo romano” [Scherzo]

Recensione pubblicata sulla rivista “SCHERZO Revista de música clásica y ópera” – Novembre 2017
Autore: Mariano Acero Ruilòpez

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Conoció el laúd su mejor época en el Renacimiento y el primer Barroco, cuan-do su estudio formaba parte de la educación de los personajes notables y un amplio número de compositores le dedicaron importantes colecciones impresas. Luego, sin llegar a desaparecer del todo, perdió protagonismo como instrumento solista y fue relegándose al bajo continuo, salvo en Alemania, donde todavía florecieron en el XVIII laudistas tan emblemáticos como Weiss. En Italia, sin embargo, nada se había publicado para laúd en las décadas finales del Seiscientos. Aunque, naturalmente, se seguía practicando. Por Giovanni Zamboni, verbigracia. Es muy poco lo que se sabe de la vida de este músico: que había nacido en Roma en fecha desconocida; que trabajó también en la catedral de Pisa; que compaginaba su actividad musical con la joyería, destacando como tallista de piedras preciosas; que compuso, al menos, un par de colecciones de madrigales y que, por supuesto, era un consumado virtuoso en todos los instrumentos de cuerda pulsada y en el clave. En 1718, en Luca, dio a la estampa, en la ya arcaica tablatura, una colección de once sonatas para laúd. Una auténtica rareza en ese momento. Zamboni demuestra conocer la música de Corelli y Weiss, posee un innegable sentido melódico y esparce por su obra rasgos pregalantes. La música de Zamboni, ya grabada – Luciano Contini nos la descubrió hace casi un cuarto de siglo -, encuentra en los dedos de Simone Vallerotonda una lectura ideal. En su debut discográfico como solista, Vallerotonda hace que la música fluya con naturalidad, articulando con precisión y sensibilidad, introduciendo sutiles variaciones en las repeticiones, manteniendo unos tiempos juiciosos y sin exageraciones, y ahondando en el sentido de las notas, marcando ligeramente el rit-mo de las danzas y tiñendo de melancólica y poética dulzura los tiempos lentos. Excelente disco.

Mariano Acero Ruilópez